”Todo esto es gracias a Cristiano Ronaldo”.

”Tengo que agradecer a mi amigo Albert Frantau por todo mi éxito. Jugamos juntos en un equipo de juveniles. Un día llego a un entrenamiento gente del Sporting de Lisboa, nos dijeron que verían un partido de nosotros y que el jugador que más goles anotara entre Albert y yo, sería quien ficharía por el Sporting”.

”Ganamos el partido por 3-0. Yo anote el primer gol, Albert hizo el segundo. Pero el tercer gol fue uno que sorprendió a todo el mundo. Mi amigo Albert se marcho por la banda, quedo frente al portero, solo y en lugar de chutar a gol, me la paso a mi. Yo solo la tuve que empujar. El pudo haber marcado fácilmente el gol, pero decidió pasármela a mi”.

”Me aceptaron en la cantera del Sporting. Después del partido, me acerque a el y le pregunte: ¿Por qué? a lo que el me respondió: ”Tu eres mejor que yo”.

Algunos años después un periodista encontró la casa de Albert Frantau para preguntarle si la historia era verdad. Albert la confirmo y también dijo que ese día fue cuando acabo su carrera futbolística. Le contó al reportero que era desempleado.

”¿Pero cómo puede tener una casa tan grande y bonita y un carro casi nuevo? También se ve que mantienes bien a tu familia”. Le cuestionó el periodista.

A lo que Albert orgullosamente contestó: ”Todo esto es gracias a Cristiano Ronaldo”.