Roger Federer y su llegada a la Argentina

El suizo se mostró encantado de llegar a Buenos Aires después del afecto recibido en Brasil y el paseo por las Cataratas del Iguazú. Ya disfruta de las tradiciones porteñas

“Hace mucho tiempo que quería venir y espero tener una gran estadía por más que sean tres días”, deseó Roger Federer en su primer contacto con la prensa argentina, a quien le confesó: “Quiero probar la comida, el vino tinto, visitar La Bombonera y jugar al fútbol”.

Terminada esa rueda de prensa, el funcionario Sergio Massa, intendente de Tigre, distrito del Gran Buenos Aires en el que se realizarán los dos juegos de exhibición frente a Juan Martín Del Potro, llevó a Roger hacía uno de esos placeres que ansiosamente quería conocer y degustar: el asado argentino.

El propio Massa subió en su twitter la fotografía que muestra al ex número uno del tenis mundial cerquita de las brazas, las achuras y la carne argentina.
Guillermo Vilas y José Luis Clerc, dos de los tenistas más importantes en la historia del deporte argentino, compartieron junto al “Maestro” suizo una tarde a puro sol, anécdotas y buen apetito.

“Es un gran placer estar aquí. Recuerdo que he jugado contra (Guillermo) Coria, (David) Nalbandian, (Gastón) Gaudio o Juan Martín (Del Potro), entre otros, y siempre sentí un gran apoyo de los jugadores argentinos”, remarcó el helvético.

En tres días lo esperan unos 40.000 espectadores en sus dos partidos de exhibición, una visita a la presidente Cristina Kirchner, La Bombonera y algunas actividades más. Mientras tanto, el considerado “mejor jugador de la historia” para muchos, concluye: “Muchos me ven como un superhéroe, pero soy un tipo normal, soy un terrícola”.