¿Qué llevó a Zizou a tomar tal decisión? ¿Cómo se iba a ir en el pináculo de su carrera? ¿Acaso la selección de Francia, para la que estaba postulado si no le iba bien en Rusia, era la razón? Casi cinco meses después de su salida, El País de Madrid reveló el verdadero motivo: la traición del presidente Florentino Pérez.
Todo comenzó porque Zidane solicitó al mandamás del Madrid que vendiera a un jugador: Gareth Bale. Lo consideraba “tácticamente disperso, irregular y demasiado individualista” y pretendía que se lo negociara para obtener unos 100 millones de euros (lo que más o menos le había costado al club incorporarlo) para conformar una ofensiva que tuviera a Cristiano Ronaldo y a Neymar. Como lo del brasileño se enfrió rápidamente, entonces el francés apuntó a Harry Kane, Eden Hazard o Mohamed Salah.
Según la crónica de El País, en enero de este año hubo un compromiso entre Zidane y Florentino de traspasar a Bale. Sin embargo, luego de la coronación en Kiev el presidente cambió de postura. Habría llamado a Bale para pedirle paciencia (el galés estaba molesto por no ser titular y evaluaba irse) y que se quedara en el club. Luego, intentó convencer a Zidane de que debía darle más oportunidades.
“Es mejor que Cristiano”, le habría dicho Florentino al técnico francés. Pero no solo eso, sino que al mismo tiempo le comunicó que en realidad el que se iría era el portugués, quien por ese entonces tenía una muy mala relación con el presidente. Esto colmó la paciencia de Zidane, quien tomó la decisión de marcharse y la comunicó el 30 de mayo.