La increíble anécdota de Gabriel Jesus.

El futbolista voló a Brasil en diciembre pasado para celebrar Navidad junto a su familia. Allí aprovechó para realizar unos tramites en el banco en donde se encontró con un viejo conocido.

“Dejé mi auto en el estacionamiento del banco y el hombre que entregaba los tickets en la pequeña cabina me resultaba familiar…

Él me miraba como si me conociera.

Me alcanzó el ticket.

Pero seguía mirándome.

Entonces dice ‘Hey, ¡pequeño niño, pequeño niño!’

Me giré para ver si se refería a mi.

Me dice ‘¿Te acuerdas de mí? The Várzea, hermano. Iba a romper tus piernas.

Yo estaba como ‘Oh mi dios’. No sabía qué iba a hacerme.

Entonces dice ‘Hombre, realmente iba a romper tus piernas. ¿Puedes creerlo?’.

Y yo estaba intentando calmar la situación. “Vamos hermano, no ibas a hacerlo. Sé que estabas bromeando”.

Entonces dice, ‘No hermano. No. Realmente iba a romperte las piernas. Y ahora juegas para mi equipo preferido. Te amo hermano. ¡No puedo creerlo! ¿Puedes imaginar si te hubiese roto las piernas?’

Nos reímos y nos tomamos una foto”.